Un ciempiés entra a una zapatería y le pregunta al vendedor: «¿Tienen zapatos para insectos?» El vendedor, confundido, responde: «¡Claro, tenemos para todas las tallas!» El ciempiés sonríe y susurra: «Perfecto, porque mis pies son cien veces más exigentes». Entonces, el vendedor exclama: «¡Esto será una maratón de probadores!»