¿Por qué la hormiga nunca ha aprendido a nadar en el río? Porque cada vez que lo intenta, las corrientes la arrastran y su familia termina llamando al equipo de «rescate en tierra firme». Al final, decidió tomar clases de «surf acrobático» con un escarabajo intrépido que usa hojas de nenúfar como tablas. ¡Ahí sí que encontró su vocación!