Filosofía en el Bar: Pensadores sin Crédito

1

Un día Platón y Descartes se encuentran en el bar de las ideas. Platón pide una «copa de esencias divinas» y Descartes, un poco confundido, dice: «Si no pienso, no existo… ¡Pero si pienso demasiado, creo que conduzco!» El camarero, un buen tipo llamado Sócrates, les responde: «Sé que no sé nada, pero sé que debo cortaros el crédito filosófico».