En la escuela, el maestro pregunta: «Juanito, ¿sabes cuál es el colmo de un electricista?». Juanito piensa y responde: «¡Que su esposa le pida que cambie un foco… a oscuras!». Todos ríen, y el maestro dice: «¡Bien hecho, pero ahora prende la luz, que no veo el pizarrón!».