¿Por qué el balón de baloncesto nunca quiso ir a una fiesta? Porque cada vez que llegaba al piso, siempre escuchaba «¡falta personal!», y claro, el pobre balón pensó que debía llevar traje de etiqueta. ¡Vaya confusión!
¿Por qué el balón de baloncesto nunca quiso ir a una fiesta? Porque cada vez que llegaba al piso, siempre escuchaba «¡falta personal!», y claro, el pobre balón pensó que debía llevar traje de etiqueta. ¡Vaya confusión!