Café Filosófico: Pensando entre Azúcar y Estoicismo

0

Un día, Descartes entró a una cafetería y pidió un café con leche. El camarero le preguntó si quería azúcar y él respondió: «Pienso, luego sí». Inmediatamente, un filósofo estoico al lado dijo: «No importa cómo edulcores la vida, ¡sigue siendo café!» Entonces ambos arrancaron un debate mientras el barista intentaba recordar si por fin serviría un café en paz.