¿Por qué los programadores detestan el verano? Porque el calor derrite sus cerebros tan rápido como un bucle infinito en un procesador. Se la pasan buscando errores… ¡y lo único que encuentran es sudor!
¿Por qué los programadores detestan el verano? Porque el calor derrite sus cerebros tan rápido como un bucle infinito en un procesador. Se la pasan buscando errores… ¡y lo único que encuentran es sudor!