¿Por qué el estudiante de idiomas siempre llevaba una libreta al zoológico? Porque cuando alguien le preguntaba por qué tanto interés en los animales, él respondía: «Es que solo quiero saber cómo es el inglés del león, el francés del mono y el español del loro, ¡así no me sorprenden con un ‘guau’ o un ‘miau’ inesperado!»