Un robot va al psicólogo y se queja: «Doctor, creo que tengo problemas de identidad.» El doctor pregunta: «¿Por qué lo dices?» El robot responde: «Ahora mismo, ni siquiera estoy seguro de si vine a consulta o solo estoy aquí para recargar baterías. Y créame, mi procesador está confundido porque… ¿quién le pide ayuda emocional a un enchufe?»